Te dare lo mejor – David Santisteban, Kairos El Renuevo
La idea de darle lo mejor de nuestras vidas a Dios es una verdad central en la fe cristiana. Implica una entrega total, un compromiso profundo y una devoción sincera a Aquel que nos ha creado, redimido y llamado a vivir en comunión con él.
Letra de la canción:
Traemos hoy ante Tu altar nuestras coronas
Queremos darte lo mejor de nuestras vidas
Te entregaré mi amor entero
Los sueños que logré alcanzar
Te daré lo mejor de mi vida
Te daré lo mejor cada día
Será mucho más que una canción
Mi obediencia es mi mejor adoración
Traemos hoy ante tu altar nuestras coronas
Queremos darte lo mejor de nuestras vidas
Daremos solo las primicias
Pues tú mereces lo mejor
Te daré lo mejor de mi vida
Te daré lo mejor cada día
Será mucho más que una canción
Mi obediencia es mi mejor adoración
Te daré lo mejor de mi vida
Te daré lo mejor cada día
Será mucho más que una canción
Mi obediencia es mi mejor adoración
Daremos solo las primicias
Pues tú mereces lo mejor
Te daré lo mejor de mi vida
Te daré lo mejor cada día
Será mucho más que una canción
Mi obediencia es mi mejor adoración
Te daré lo mejor de mi vida
Te daré lo mejor cada día
Será mucho más que una canción
Mi obediencia es mi mejor adoración
Te daré lo mejor de mí
Te daré lo mejor de mí
Te daré lo mejor de mí
Te daré lo mejor
La Llamada a la Entrega Total:
Desde los primeros relatos bíblicos hasta las enseñanzas de Jesucristo, la Biblia nos llama a darle lo mejor de nuestras vidas a Dios. Esta llamada no es simplemente una sugerencia, sino un mandato divino que nos invita a poner a Dios en el centro de nuestras vidas y a entregarle todo lo que somos y todo lo que tenemos. Jesús nos insta a amar a Dios con todo nuestro corazón, alma, mente y fuerzas (Marcos 12:30), reconociendo que él merece nuestra devoción y entrega total.
El Modelo de Entrega de Jesucristo:
El ejemplo supremo de entrega total lo encontramos en la vida y el ministerio de Jesucristo. Él vivió en perfecta comunión con el Padre, sometiéndose completamente a su voluntad y entregando su vida como un sacrificio por nuestros pecados. Jesús nos llama a seguir su ejemplo, renunciando a nosotros mismos, tomando nuestra cruz y siguiéndolo (Mateo 16:24), sabiendo que la verdadera vida se encuentra en la rendición completa a la voluntad de Dios.
La Devoción en la Práctica Diaria:
Darle lo mejor de nuestras vidas a Dios no se limita a momentos específicos de adoración o servicio, sino que se manifiesta en cada aspecto de nuestras vidas diarias. Implica honrar a Dios en nuestras relaciones, en nuestro trabajo, en nuestras finanzas, en nuestras decisiones y en nuestras prioridades. Significa vivir con integridad y humildad, reconociendo que todo lo que tenemos viene de Dios y que estamos llamados a ser buenos administradores de sus dones.
El Fruto de la Entrega Total:
Cuando le damos lo mejor de nuestras vidas a Dios, experimentamos el fruto de una relación íntima y significativa con él. Experimentamos paz en medio de las pruebas, gozo en la comunión con el Espíritu Santo y una profunda satisfacción en saber que estamos viviendo en línea con el propósito y la voluntad de Dios para nuestras vidas. Además, nuestra entrega total inspira a otros a buscar a Dios y a vivir con pasión y compromiso en su servicio.
Conclusión:
En conclusión, darle lo mejor de nuestras vidas a Dios es una expresión de amor, devoción y entrega total a Aquel que nos amó primero. Nos llama a vivir en comunión íntima con él, a seguir el ejemplo de Jesucristo en rendición y obediencia, y a buscar su reino y su justicia en todo lo que hacemos. Que podamos responder a esta llamada con corazones dispuestos y manos abiertas, entregando todo lo que somos y todo lo que tenemos en servicio a nuestro Señor y Salvador.
